León Ferrari en el Bellas Artes (Arte)
Una gran muestra antológica presenta, con entrada libre y gratuita, cerca de 250 obras del notable artista argentino, con curaduría de Cecilia Rabossi y Andrés Duprat.
"León Ferrari.
Recurrencias", primera exposición individual que el Museo Nacional de
Bellas Artes le dedica al artista argentino (1920-2013), se inaugura al público
el martes 16 de mayo, a las 19.
Esta muestra antológica,
organizada junto a la Fundación Augusto y León Ferrari Arte y Acervo (FALFAA),
y con curaduría de Cecilia Rabossi y Andrés Duprat, reúne cerca de 250 obras,
entre las que se incluyen dibujos, tintas, collages, grabados, objetos,
heliografías, planos y cerámicas del período 1960-2011, procedentes de la
colección del Museo, de la colección de la familia Ferrari y de la FALFAA.
“Esta exposición ‒comenta
Duprat, director del Museo‒ es un reconocimiento institucional a uno de los
artistas argentinos más relevantes de la historia, creador de una obra sólida y
singular, que ha sido celebrada en todo el mundo”. Prevista originalmente para
2020, en ocasión del centenario del artista, pero suspendida por la pandemia
global del covid, su postergación la hace coincidir ahora con la conmemoración
de los cuarenta años del regreso a la democracia en la Argentina. “Este hecho resulta
significativo, ya que muchas de las obras elegidas construyen una suerte de
relato de los oscuros tiempos de la última dictadura militar. Esta exposición
se vuelve, entonces, un llamado a reflexionar en torno a la construcción de una
sociedad sin violencia y autoritarismo, más equitativa y solidaria”, agrega el
titular del Bellas Artes.
“A lo largo de más de
medio siglo de prolífica producción ‒explican los curadores, Rabossi y Duprat‒,
una serie de preocupaciones recurrentes ‒como la religión, la intolerancia, el
poder y la violencia‒ acompañaron a León Ferrari. Su posición crítica sobre la
matriz cultural occidental y cristiana estuvo atravesada por la ironía y el
sarcasmo. Buscaba despertar conciencias; planteaba el arte como un ‘altavoz’,
un instrumento para transmitir y amplificar ideas, y reivindicaba su valor
cuestionador”.
“León Ferrari.
Recurrencias” está organizada en cuatro núcleos. El primero, “Abstracciones”,
se centra en obras que el artista denominaba “abstractas”, donde la línea es un
elemento central, ya sea sobre la superficie del papel o en la trama
tridimensional.
“La civilización
occidental y cristiana”, el segundo núcleo, se articula a partir de la icónica
obra homónima realizada en 1965 para el Premio Di Tella, ocasión en que fue
censurada por motivos religiosos. Esta pieza abrió su producción
definitivamente política. Este núcleo incluye, además, “Manuscritos”, “Palabras
ajenas” (1967), “Nosotros no sabíamos” (1976), “Nunca más” y “Mimetismos e
infiernos”. “Infiernos y otras cuestiones devotas”, el tercer eje, se concentra
en el estudio que Ferrari emprendió, desde la década del 80, de los textos y la
iconografía cristiana. Investigó entonces la violencia de ciertos pasajes de la
Biblia, y cuestionó la idea del Infierno y su representación en la historia del
arte. Series como “La Basílica”, “Paraherejes”, “La Biblia”, “Proyecto contra
el Infierno” y “Relectura de la Biblia” presentan, en la muestra, distintas
aproximaciones al tema. El último núcleo, “Ciudades y arquitecturas de la
locura”, despliega planos y urbanizaciones que exhiben aspectos ilógicos e
irracionales de la sociedad moderna. Estas obras se produjeron durante el
exilio del artista en San Pablo, a partir de 1976. Allí, experimentó con nuevos
medios, como heliografía, sellos, planos, Letraset, video texto, arte correo,
expresiones con las que manifestó la enajenación de esos espacios habitables y
expuso la opresión de los terribles años de la dictadura militar argentina.
Además, en la sala, se proyecta de forma continua el documental “Civilización”
(2012), dirigido por Rubén Guzmán, que recorre las ideas del artista y su
producción a través de material de archivo inédito, entrevistas exclusivas y el
registro audiovisual de Ferrari mientras realiza una obra original
especialmente para este filme. Como parte de la muestra, también se exhibe la
escultura lúdica “Berimbau” al aire libre, en los jardines detrás del edificio
del Museo.
Simultáneamente, en el
segundo piso, continúa hasta el 28 de mayo “Fotografías de Augusto Ferrari en
la colección del Bellas Artes”, la exposición que el Museo dedica a la obra del
pintor, arquitecto y fotógrafo nacido en Italia, y padre de León.
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